Tras casi un año de emisión, hoy hablaremos de Anger Management, la popular comedia de FX protagonizada por el siempre carismático Charlie Sheen, que no logra salir de ese profundo encasillamiento que lo convirtió en el actor de televisión mejor pagado del mundo durante años, pero que también ha supuesto el pilar base de su carrera en su etapa de madurez (madurez entendida como concepto físico, no mental, que anda que no se pega juergas de las buenas nuestro amigo Sheen), Dos hombres y medio.
Charlie Sheen prometía los vientos con su regreso a la televisión tras la controvertida -y bochornosa- expulsión de la serie que protagonizaba desde casi una década. Para la mayoría estaba claro que su salida de la serie era el final de un mito, pero el dinero puede y todavía han querido intentar exprimir un poco más lo que queda de la gallina de los huevos de oro.
Una de cal, y otra... ¿de cal?
Bien, sabemos que Sheen vende en un formato, y debemos vender, ¿pero hacía falta copiar de arriba a abajo el esquma de Two and a half men? Cuando ves Anger Management en ningún momento te abandona esa sensación de estar entrando por el aro, tragándote exáctamente lo mismo que vendía el mismo actor en otra cadena 4 meses atrás.
No hay ideas nuevas, y desde luego ningún riesgo interpretativo, Charlie Sheen debe ser un mujeriego protagonista de una comedia de situación, haciendo básicamente de sí mismo en la pequeña pantalla, y apuesto a que cobrando muy bien por ello.
No es un hasta luego, es un adiós.
Cabe destacar que el antaño popular -para algunos mítico- actor televisivo amante a partes iguales de las mujeres, el alcohol y cualquier tipo de experiencia, llamémosla espiritual, por medio de sustancias poco espirituales anunció que Anger Management será su último trabajo como actor profesional, tras lo cual se tomará un dudosamente merecido retiro permanente. Desde Series ly te recomendamos que no lo pierdas de vista.
Sabíamos que no duraría para siempre, pero nos queda Charlie Sheen para rato. La serie, pasable, vive de su foto de portada y no de la calidad de sus guiones.
Charlie Sheen prometía los vientos con su regreso a la televisión tras la controvertida -y bochornosa- expulsión de la serie que protagonizaba desde casi una década. Para la mayoría estaba claro que su salida de la serie era el final de un mito, pero el dinero puede y todavía han querido intentar exprimir un poco más lo que queda de la gallina de los huevos de oro.
Una de cal, y otra... ¿de cal?
Bien, sabemos que Sheen vende en un formato, y debemos vender, ¿pero hacía falta copiar de arriba a abajo el esquma de Two and a half men? Cuando ves Anger Management en ningún momento te abandona esa sensación de estar entrando por el aro, tragándote exáctamente lo mismo que vendía el mismo actor en otra cadena 4 meses atrás.
No hay ideas nuevas, y desde luego ningún riesgo interpretativo, Charlie Sheen debe ser un mujeriego protagonista de una comedia de situación, haciendo básicamente de sí mismo en la pequeña pantalla, y apuesto a que cobrando muy bien por ello.
No es un hasta luego, es un adiós.
Cabe destacar que el antaño popular -para algunos mítico- actor televisivo amante a partes iguales de las mujeres, el alcohol y cualquier tipo de experiencia, llamémosla espiritual, por medio de sustancias poco espirituales anunció que Anger Management será su último trabajo como actor profesional, tras lo cual se tomará un dudosamente merecido retiro permanente. Desde Series ly te recomendamos que no lo pierdas de vista.
Sabíamos que no duraría para siempre, pero nos queda Charlie Sheen para rato. La serie, pasable, vive de su foto de portada y no de la calidad de sus guiones.
